Encontrar un nuevo hogar produce una de las mejores sensaciones: ya empiezas a imaginar dónde pondrás los muebles, qué color pintarás las paredes, cómo arreglarás tu cuarto y las otras habitaciones… imaginas futuras reuniones con amigos y familia. ¿Cómo llegar a esta agradable situación? En esta nota te comparto todo lo que debes saber para encontrar tu próximo hogar.
La casa simboliza un refugio: es nuestro espacio de confort, el lugar donde nos sentimos cómodos, seguros y libres de hacer lo que queramos. Nuestra casa es nuestra mejor aliada. Por eso es esencial que, además de ser un espacio con paredes y techo, tenga un aire amable y afín a lo que somos como personas.
Definir presupuesto
Tu punto de partida y, tal vez, la parte más pesada de todo este proceso de encontrar un nuevo hogar es definir el monto de dinero que cubrirá la compra, alquiler o anticrético de la no definida, por el momento, casa o departamento. El propósito de establecer el presupuesto es el de definir un margen, el cual no deberá ser sobrepasado. Será tu referencia al momento de iniciar con la búsqueda.
En esta etapa, igualmente, procura delimitar la fuente de dinero y forma de pago. Ya sea que tus ahorros o un crédito hipotecario estén en juego, es importante que antes de continuar ya cuentes con el capital o la aprobación, respectivamente. Anula la intención de reunir una cantidad deseada o hipotéticamente establecer un monto. Se busca lo real, posible y concreto.
Contextualización
A partir de este momento, la experiencia se vuelve más divertida y dinámica, aunque no menos enredada. Ingresas a un contexto más personal. Aquí, te toca hacer un análisis de tú propia situación: tus objetivos –corto, mediano o largo plazo–, necesidades, preferencias, deseos y si existe la opción de tomar en cuenta a una segunda persona o varias (pareja, familia, amigos, etcétera.).
Aunque parece una tarea sencilla, te recomiendo que verdaderamente inviertas tu tiempo en contextualizar, concientizarte y crear todos los escenarios posibles. Esto te ayudará a aclarar el panorama y tomar las mejores decisiones. ¿Qué puede salir mal si lo tienes todo bajo control? En efecto, es bastante satisfactorio y evitas conflictos innecesarios.
Buscar y segmentar
Cada vez te encuentras más cerca de tu nuevo hogar. El tercer paso consta de hacer tangible tus gustos o, mejor dicho, tratar de que se alineen con las ofertas que estén disponibles en el mercado inmobiliario. El objetivo es que encuentres la casa o departamento que mejor se ajuste a tu personalidad y necesidades.
Te sugiero que no pongas la barra muy arriba, es decir que no establezcas expectativas muy altas o irreales; esto para evitar caer en desilusiones, frustraciones o decepciones. Actuar en base a actitudes positivas y abiertas a cualquier posibilidad es la vía más atractiva para alcanzar lo que aspiras.
Tú labor es hacer una búsqueda exhaustiva de todo lo que esté disponible. Cerciórate de examinar todas las propiedades que se encuentren dentro del presupuesto establecido. Ojo que no es obligatorio gastar todo el dinero, es incluso mejor contar con un monto disponible para cualquier refacción o trabajo posterior.
Asegúrate de organizarte. Qué mejor que tener varias opciones, ordenarlas según precios y nivel de inclinación: de mayor a menor agrado. Si optas por este tipo de dinámica, lograrás elegir la mejor alternativa, basada en comparación y un análisis de conveniencia.
Tip: Para mayor eficiencia, ahorro de tiempo y dinero, te sugiero recurras a la búsqueda online. Por ejemplo, UltraCasas.com te ofrece diversas opciones concentradas en un solo lugar. Las ofertas deleitan al comprador con fotos, y están categorizadas según precios y zonas. Por si fuera poco, se te da la opción de guardar aquello que te gusta y continuar explorando inmuebles afines a tu agrado.
Contactarse con los propietarios
Una vez que hayas completado la fase de sondeo, descarte y selección, pasas a la interacción directa con los propietarios de las casas finalistas. Aquí se permite dibujo libre, en realidad depende de ti cómo manejas las diferentes situaciones. No obstante, te aclaro el camino:
- Comunícate con los vendedores a través de una llamada telefónica.
- Siéntete libre de aclarar tus dudas, haz preguntas.
- Si la propuesta te convence, agenda una visita a la casa. No tomes decisiones impulsivas y apresuradas: antes de haber percibido la atmósfera de la zona o barrio y haber explorado la vivienda.
- Visita el lugar o lugares. Mejor si lo haces acompañado, nunca está de más una segunda o tercera opinión.
Ofertar
¡Por fin!… A esta altura, estás a punto de concretar la compra, alquiler o anticrético de la casa que mejor ha respondido a tus estándares. Es momento de hacer una oferta:
- Comunícate con el propietario
- Pide los papeles del inmueble para hacer la revisión respectiva. Es importante que estos estén al día, que no exista ningún trámite pendiente o hipotecas sobre la vivienda.
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- Visita, una vez más la casa o departamento, para asegurar que todo está en orden y reafirmar que definitivamente tiene el potencial de ser tu nuevo hogar.
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- Los escenarios serán diferentes según el trato que se determine, las condiciones, si la entrega de la casa es inmediata o no y si no existe ningún problema con la propiedad.